lunes, 27 de agosto de 2007

Promoción

“Sabemos en la situación en la que estamos. Nadie está contento con los resultados, pero tampoco es para hablar del promedio cuando el torneo recién arrancó”.
Emiliana Papa, jugador de Central, en Ovación.

“Del tema de la promoción se tienen que preocupar en estos momentos los equipos que realmente están complicados. La verdad es que no estamos preocupados por eso”.
Damián Ledesma, jugador y capitán de Central, en Ovación.

“El tema del promedio se instaló ahora porque no estamos obteniendo los resultados que deseamos. Pero tampoco hay que volverse locos porque el torneo recién empieza. Cuando logremos un triunfo y el equipo vaya tomando confianza, no se hablará más de esto”.
Cristian Alvarez, arquero de Central, en Ovación.

El problema de Central no es empezar a hablar de la promoción cuando recién se jugaron cuatro partidos del torneo Apertura y el equipo de Carlos Ischia sumó apenas dos puntos, con dos empates y dos derrotas. Mucho más preocupante todavía es lo que viene. Sin ir más lejos, en cuatro días (mañana martes ante Colón y el viernes a Olimpo) tendrá que jugar dos de esos partidos que se parecen demasiado a una final, pero no para ganar un título sino para no entrar en la zona de promoción. Está claro que si lograse los seis puntos, entonces se podrá decir que Papa, Ledesma y Alvaraz tuvieron razón cuando se mostraron tan despreocupados por el tema en estas declaraciones publicadas hoy en el suplemento deportivo de La Capital. ¿Se podrá decir lo mismo si Central no saca una buena cosecha de puntos en esos dos partidos cruciales? Alejandro España escribió hoy en El Ciudadano: "Central está destinado a penas en este torneo, y no debe sorprender a nadie que en cuatro fechas haya sumado apenas dos puntos. ¿Cuánto más podía esperarse de un equipo sin individualidades, reforzado con jugadores aptos para categorías menores?". Ese es el verdadero problema de Central, y la sombría impresión de que en unas cuantas fechas podría estar mucho peor. No hablar de la promoción no mejorará nada. Y quien instala el tema no es el periodista que pregunta sino la tabla de posiciones. Por último, empezar a jugar "finales" cuando el campeonato (en este caso uno de 38 fechas) recién comienza, es una muy mala señal. Tomar conciencia de ello quizás ayude a enfrentarlo de otra manera.

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